Creencias

Existe la creencia que "Por naturaleza, las mujeres son más protectoras y los hombres más violentos".

Yo coincido con esta creencia totalmente y principalmente en México, donde las mamás mexicanas tienen la fama de ser mujeres muy protectoras de sus hijos y hasta de los que no lo son, son cariñosas, pero con un carácter fuerte; por otro lado sabemos que gran parte de los hombres mexicanos son machistas y violentos, donde con facilidad se prestan para peleas. Aunque sabemos que existen matices.

Yo me baso mi postura en esta creencia en dos cosas, he investigado diversos temas sobre la violencia en México y sin duda los hombres son más violentos y machistas que las mujeres, por lo que las mujeres las cuales son en gran parte madres solteras tienden a ser mucho más protectoras y eso va creando más generaciones de lo mismo. Pero también científicamente sabemos que los hombres tienden a ser más violentos por selección natural en el sentido de que sobrevive el más
fuerte y las mujeres más protectoras que eso también lo podemos ver claramente en el reino animal.

 Pero algo que es importante, ¿por qué creo en esto? mis vivencias familiares me lo ha demostrado constantemente, así veo el mundo, los hombres son malos y las mujeres deben cuidar y proteger lo suyo. 

En mi familia somos cinco personas, donde solo mi madre cuidó de nosotros y conforme crecía me fui dando cuenta de muchas cosas a mi alrededor, la única imagen que tengo de una figura masculina fue la de mi hermano mayor, solía ser muy hiperactivo y violento por lo tanto es la imagen que tengo de los hombres aunque sé que no es en plural siempre relaciono todo inconscientemente con el porqué es mi experiencia y yo creo mi realidad con base en mis recuerdos. Mi mamá siempre se quejaba de los hombres en especial de mi papá que nunca vivió con nosotros, y yo enriquecía mis pensamientos y la imagen de los hombres, son malos y violentos. Siempre fue muy protectora, no podía salir casi, pero era su manera de cuidarnos y mantener el control de la familia.

Esta creencia no me ha ayudado mucho en las relaciones personales, me cuesta trabajo cambiar mi perspectiva hacía los hombres porque por años he escuchado a mi mamá quejarse de ellos que ya me impregnó hasta las venas de esa manera de pensar, pero me he dado cuenta de muchas cosas, recientemente fui a la casa de una amiga y me pasó algo raro, pude observar la relación de su mamá con su papá, era algo muy ajeno a mi vida, a la visión que yo tenía de la realidad, sentí muy extraño, pero a la vez fue bonito, era una sensación agradable saber que había un hombre en la casa y que interactuaban de una manera positiva y de cooperación, esa sensación cambió mi chip y me hizo hacerme preguntas epistemológicas, logré comprender todo lo que hemos visto a lo largo de la clase.

Creo que si es necesario cambiar esta creencia porque debemos aprender a juzgar con base en nuestras experiencias no en las de otros, tampoco es bueno contaminar a otros con nuestros pensamientos negativos sobre las personas.


En cuanto al dilema ético con el que se enfrentaron los estudiantes en el PAP, yo no habría participado en aquello porque si se tiene la seguridad de que la idea es buena y puede funcionar, podríamos encontrar otra alternativa mejor y con una inmobiliaria que respete los códigos de ética. Además el hecho de presentar estos engaños es señal que seguirán existiendo y yo no quisiera participar. Y pienso eso porque no hay que depender nunca de nadie, vuelvo a lo mismo de mis creencias, mi madre siempre demostró que si alguien te cerraba las puertas podría abrir otras yo misma. La independencia y el obrar de manera correcta es muy importante, pero ante todo el obrar bien.

























Comentarios

  1. Melissa, haces una reflexión muy honesta y concienzuda al respecto. Hacer reflexión ética es justamente revisar el origen de nuestra postura moral ante una situación y revisar también sus consecuencias, y, en este caso, yo te preguntaría ¿no crees que la violencia de los hombre es justamente porque ellos mismos terminan creyéndose esa afirmación, y que entonces no es un asunto de naturaleza sino de una imposición social?
    Lo que tú hiciste al revisar esa creencia, es justamente revisar de dónde viene una postura moral, cómo la podemos poner en tela de juicio pensando en sus consecuencias, y de qué manera se puede mover. Lo mismo pasa con las teorías o el conocimiento científico: también conviene ponerlo a prueba o cambiarlo al revisar sus efectos.
    Con estos dos ejemplos podemos ver cómo se relacionan el conocimiento y la ética.

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